"El celular, quizás por mi trabajo, puede tener prioridad para estar intercomunicada. Cuando no tenés el celular, no te podés conectar con el mundo. Es el mismo marketing que crea la necesidad, porque hemos estado tantos años sin celular. Pero no tengo una dependencia. Mi única dependencia es sólo con el trabajo. Es una dependencia generada por mi profesión, pero no significa que tenga una necesidad imperiosa. Aunque varias veces me he vuelto a buscarlo, ahora puedo estar tranquilamente sin teléfono. Me pasa lo mismo con la computadora. Si se rompe la computadora en el trabajo es como quedás sin poder hacer nada, pero no es así, porque hace un par de años nos manejábamos sin celular y sin computadora".